El pegging es un término en inglés que se refiere a la práctica sexual en la que la mujer penetra al hombre utilizando un consolador que se sostiene con un arnés el cual se ajusta en la cintura y la cadera.
Es importante aclarar que el hecho de que un hombre disfrute de esta práctica no tiene nada que ver con su orientación sexual para muchos hombres la estimulación anal resulta muy placentera debido a que es una zona con muchas terminaciones nerviosas.
Cómo practicar pegging sin riesgos
Consejos
- Lo primero que tenemos que tener claro es que el pegging es una práctica sexual que debe ser (como todas) consentida por ambas partes de la pareja. La comunicación es vital en las relaciones y si la vamos a poner en práctica es imprescindible hablarlo antes, como ocurriría con cualquier otro juego sexual.
- Una vez hablado, necesitamos un arnés sexual
- En cuanto a la práctica: Comenzaremos por decirte que la excitación en este caso es vital. No podemos llegar y meternos de lleno. Igual que a las personas con vagina nos puede resultar dolorosa la penetración sin una estimulación y excitación previa, al ano (ya sea de él o de ella) también puede molestarle.
- El ano no es una zona que lubrique, así que necesitaremos algo de ayuda cuando llegue el momento de introducir el dildo. Podemos comenzar con unos plug anales y lubricante.
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